Bajo el lema “los niños nacen como nacen y nacieron para ser amados” la Fundación Línea de Mi Pensamiento creó talleres de arte que sirven de herramienta para procesar estímulos sensoriales en niños y niñas con autismo.
Los adiestramientos permiten una oportunidad de romper con dinámicas de enseñanza monótonas y conectar conocimientos del salón de clases mediante destrezas que pueden ser aplicadas en el día a día.
“Trabajar con los maestros y certificarlos para que ellos puedan continuar enseñando, es algo que abarca más que yo solo”, sostuvo el fundador de la organización, Melquiades Rosario Sastre, al destacar la importancia de los talleres que ofrece para el magisterio.
Rosario Sastre creó el proyecto luego que su hijo fuese diagnosticado con autismo. “Yo dije que yo iba a hacer una fundación para ayudarlo”, manifestó.
Por otra parte, para la maestra de matemáticas Mayra Franco es importante este tipo de talleres porque “hay que buscar el talento que tiene todo el mundo”. La educadora señaló que no todos los estudiantes son iguales, por lo que describió el proceso de evaluación tradicional como uno que deja rezagos en el alumnado.
“El sistema los aplasta porque académicamente no te van a rendir, pero le puedes sacar el talento en otras cosas”, dijo Franco.
La organización carece de voluntarios que ofrezcan los talleres, por lo que ha causado un atraso en la capacitación de maestros. “Necesitamos más gente dispuesta a ofrecer esos talleres”, concluyó Rosario Sastre al destacar la importancia del voluntariado en su organización.
Por: Aurimar Báez